Comunicados

ESTE BLOG Y LAS OPINIONES AQUÍ VERTIDAS CONSTITUYEN UNA HERRAMIENTA DE DEBATE Y NO EXPRESAN LA OPINIÓN OFICIAL DEL CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA.

La economía y la sociedad canaria sufren por la falta de competencia en muchos ámbitos. Porque la falta de apertura es la que está provocando que la recuperación del empleo no sea tan fuerte como podría ser. Y escasa participación del sector privado es uno de los causantes, entre otras razones, que las listas de espera en la sanidad sean un problema en aumento. 

 La competencia supone la base de la evolución de una sociedad en todas sus escalas: competencia política, traducida en la rivalidad entre distintas formaciones para alcanzar el poder; ideológica, que se plasma en la libertad de expresión y el debate de ideas; y la empresarial, la que permite que cada ciudadano persiga sus intereses económicos y que ha posibilitado que podamos disfrutar de innovación y que abarata continuamente servicios como telefonía, internet o automoción. 

La apertura, por ejemplo, ha de entrar definitivamente en la Sanidad canaria. “Hay que acabar con la lucha entre lo público y lo privado, una situación que está provocada por el miedo a la competencia”, asegura el presidente del Grupo Domingo Alonso y miembro del CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA, Sergio Alonso. “Porque lo público trabaja mucho más cómodo si no se puede comparar”. “Nadie pone en duda que el sector sanitario ha de ser público”, completa otro miembro del Círculo, el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Agustín Manrique de Lara. “Pero el equilibrio entre recursos públicos y privados en Sanidad es el óptimo para dar un mejor servicio al ciudadano”. 

La entrada de mayor competencia público-privada redundaría en beneficio de todos. “Cuando un paciente entra en la lista de espera para operarse y le dan fecha para dentro de un año, no solo le están creando un problema personal de graves consecuencias”, explica Sergio Alonso. “Además constituye una irracionalidad económica evidente: se le da de baja, por lo tanto deja de cotizar y recibe un salario de la Seguridad Social. Es decir, sería más rentable pagarle la operación en una clínica privada, para que pudiera incorporarse cuanto antes a su vida personal y laboral y evitar así una irracional perdida para las arcas públicas”. 

La economía de las islas también sufre por la falta de apertura. Leyes como la moratoria se crearon para proteger a los negocios existentes. Lo mismo sucede con casos como el del Puerto de las Nieves. Allí, la naviera Fred Olsen disfruta desde 1991 del derecho exclusivo de uso y, además, de la exoneración de ciertas tasas. La Naviera Armas (cuyo presidente, Antonio Armas, es miembro del CÍRCULO DE EMPRESARIOS DE GRAN CANARIA) ha acudido al Tribunal General de la UE en busca de amparo legal contra este hecho para poder competir con la compañía de origen noruego en el tráfico marítimo de pasajeros y mercancías entre Agaete y Santa Cruz de Tenerife. Armas, que ya había denunciado esta situación en 2013, no acepta así la decisión que la Comisión Europea adoptó a finales del año pasado y reclama a la justicia comunitaria que la anule. 

Armas ha de recurrir a la justicia para lograr algo que debería estar garantizado por las autoridades: la competencia.

Porque solo con ella cada Isla, cada institución, cada empresa y cada persona serán más eficientes, capaces, competitivas y duraderas.