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Carta póstuma de Mario Romero Mur a Sergio Alonso

Carta póstuma de Mario Romero Mur a Sergio Alonso

ago. 20, 2018

Son muchos los que han tenido la oportunidad de conocer a Sergio Alonso, entre los cuales me incluyo. Durante más de treinta años me honró con su amistad. Fue, sin embargo, la convivencia en el Círculo de Empresarios de Gran Canaria, del que fue presidente, miembro desde sus inicios y uno de los integrantes que le dieron forma, prestigio y proyección desde el primer momento, la que nos permitió conocer más su valía empresarial, su calidad humana como persona de principios y valores inquebrantables, y su excepcional compromiso social. Unas cualidades que supo transmitir no sólo al Círculo de Empresarios, sino a todos y cada uno de los que acudían a nuestras reuniones de trabajo. Ahí también fue ejemplar. 

Mi amigo Sergio reunía cualidades que resulta muy atípico ver concentradas en una misma persona. Ojalá fuese lo normal. Sorprendía ver su inquietud permanente por el devenir de nuestra tierra; su interés por profundizar en la raíz de las cosas hasta poder entenderlas para ver cómo se puede mejorar. Era un humano de templanza y prudencia: nunca lo conocí ni irritado, ni malhumorado, y créanme, tuvimos muchas ocasiones y muy justificadas. Sin embargo, incluso en esos momentos, su permanente sonrisa ponía orden en el caos, y su verbo fácil, elegante y certero anticipaba un rosario de argumentos irrebatible por el interlocutor. Siempre ha sido una suerte tener un primer espada de esa categoría en tu equipo.  

Sergio anduvo un largo camino, bien lo saben su familia, amigos y colaboradores. Empresarialmente deja un legado que es un orgullo para esta tierra. Son miles las familias que han encontrado la manera de salir adelante y de realizarse profesionalmente en su impulso empresarial. Porque recibió un legado que supo acrecentar brillantemente, un legado que supo llevar más allá de nuestras fronteras. 

Sobra decir, que la huella dejada es profunda e imborrable. Estas ausencias producen una tristeza inmensa, pero nos queda la alegría de haber compartido extraordinarios e inolvidables momentos.

Te echaremos de menos, Amigo.  

Mario Romero Mur
Presidente del Círculo de Empresarios de Gran Canaria